Una tormenta de arena de gran magnitud sorprendió la tarde del sábado a los habitantes de Chihuahua y Aldama, luego de avanzar desde la región de Samalayuca, al norte del estado, impulsada por intensas ráfagas de viento.
El impresionante fenómeno natural generó una columna de tierra que rodeó la ciudad de Chihuahua y se desplazó por detrás de la Sierra de Nombre de Dios, alcanzando posteriormente el municipio de Aldama. La nube de arena fue tan densa y alta que superaba la altura de los cerros, provocando asombro entre quienes lograron presenciarla.
Las nubes de polvo avanzaron con rapidez por la carretera que conecta con la capital del estado, provocando una drástica reducción de visibilidad. Automovilistas que transitaban por la zona se vieron obligados a reducir la velocidad o detenerse momentáneamente, ante el riesgo de accidentes por el polvo en suspensión.
Ante esta situación, las autoridades de Protección Civil hicieron un llamado a extremar precauciones, especialmente al circular por caminos rurales y tramos carreteros donde la visibilidad puede ser nula.
Hasta el momento, no se reportan personas lesionadas ni accidentes, pero continúa el monitoreo meteorológico para prevenir mayores afectaciones. Asimismo, se reportó acumulación de tierra en viviendas y comercios, por lo que se recomienda:
Las autoridades recordaron que este tipo de fenómenos es común durante la temporada de calor en zonas desérticas del estado, pero su intensidad puede variar, por lo que es importante mantenerse informado a través de fuentes oficiales.
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