En referencia a déficit fiscal, tranquilos, el presupuesto se diseña con cuidado en este rubro, aunque afecta el gasto público pues la reforma fiscal sigue en análisis por la presidente Sheinbaum, aunque el senador Monreal se aloque.
El crecimiento de la deuda con AMLO incrementó el pago de intereses de la deuda 8.5% al llegar a 1.39 billones en 2025 (15% del gasto) Aun así, la Secretaría de Hacienda calcula que la economía crecerá entre 2% y 3% en 2025; los demás lo dan más bajo: Banco Mundial (1.5%) FMI (1.3%) OCDE y Banco de México (1.2%) BBVA y Citibanamex (1%)
¿Es complot contra el gobierno o la secretaría de Hacienda fija un crecimiento irreal para cubrir el déficit que provocará al mentir en la cifra de crecimiento? Lo veremos a la mitad de 2025
Programas y proyectos de inversión tienen $1.02 billones: 17 programas sociales (836 mmdp) y 10 proyectos de inversión (189 mmdp) Pagar la ayuda social requiere ingreso. La falta de inversión suficiente y oportuna acota el crecimiento económico y a los programas sociales que serán no atendibles presupuestalmente en un par de años, al ritmo actual de gasto y de retorno.
Otras variables: El tipo de cambio 2025 será $18.7 por dólar (Hacienda) Lleva semanas de $20 por dólar. Difícil. La tasa de inflación se espera de 3.5%, menor a la estimada 2024 de 4.3% que terminará en 6%. Muy irreal. El precio de la mezcla mexicana de petróleo crudo de exportación se calcula en 58 dólares por barril, 18% menor al estimado 2024 (71 USD) Sensatez.
La producción de petróleo por Pemex y socios sería de 1,891 millones de barriles diarios (MMbd) A pesar del enprme apoyo financiero a Perdex por AMLO, ya no se espera sea capaz de incrementar la producción, así que Perdex continuará absorbiendo dinero y arrojando escupitajos de combustible. Muy real.
Se prevé ingreso de $9.30 billones, reducción de 3.3% respecto a 2024. $1.25 billones corresponden a ingresos por financiamiento de deuda pública para cubrir gasto. Los $8 billones (86%) corresponden a ingresos por: venta de bienes y servicios; cobro de impuestos, cuotas y aportaciones de seguridad social, derechos, productos, aprovechamientos, entre otras contribuciones.
Es un gasto social pues prioriza los programas de transferencia económica por sobre inversión sostenible que permita ingresos para hacer sostenible la ayuda social, la que no se cuestiona en lo general, sin embargo requiere de dinero del que el gobierno carece y de manera encarnizada se volverá en contra de aquel al que pueda arrebatárselo bajo el pretexto de ayuda social.
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