Quizá la mayoría de los analistas de la información nacional recibimos el triunfo electoral para la presidencia de la República, con cierto escepticismo. La razón es porque juramos viviríamos un ‘pan con lo mismo’. Las señales que ahora reconozco pertenecen a quienes juraron habría cambios significativos en relación al estilo de gobernar del macuspano.
A pesar de los sangrientos asesinatos a lo largo y ancho del país, con énfasis en Guerrero, Guanajuato y Sinaloa, es muy posible que los incrédulos empecemos a cambiar de opinión cuando nos enteramos de que la presidente, Claudia Sheinbaum Pardo ordenó la destitución del general Francisco de Jesús Leana Ojeda quien declaró “…la seguridad en Sinaloa no depende de los militares, sino de los grupos criminales”.
El general destituido de las funciones militares en la Tercera Región Militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) se desempeñaba como titular en el mando con sede en Mazatlán, Sinaloa y mando en Durango, por lo que fue enviado al centro del país por órdenes de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
La determinación presidencial se hace pública y precisamente esa es la diferencia con el anterior sexenio, lo mismo aplica cuando se supo de dos militares que balearon una camioneta con migrantes en Chiapas con saldo de seis muertos y 10 heridos, por lo que la titular del Ejecutivo Federal ordena su inmediata destitución y vinculación a proceso judicial.
Volviendo al caso del general Francisco Jesús Leana Ojeda, dejó la sede militar en Sinaloa el pasado 02 de octubre para tomar posesión de un cargo nuevo como comandante de la primera región militar con sede en la Ciudad de México.
“Por orden de la ciudadana presidenta de la república, se conocerá como comandante de la primera región militar al ciudadano general de División Diplomado de Estado Mayor, Francisco de Jesús Leana Ojeda, a quien se guardará el respeto debido a su jerarquía y se obedecerá en todo lo que mandare referente al servicio, de palabra o por escrito, de conformidad con lo establecido en las leyes y reglamentos”, dice el nombramiento.
De acuerdo con la división territorial militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la primera región militar comprende las entidades de Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo y Morelos.
Otra cuestión diferente en la administración presidencial es la atención que tendrá el cuerpo diplomático del país, cuando sea el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Dr. Juan Ramón de la Fuente, quién atienda a los embajadores, como en el caso de Ken Salazar de E. U., que tendrá como última instancia la presidencia.







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