Tras aprobarse por 27 votos a favor, 6 en contra y dos abstenciones, el dictamen donde se suprime la participación de los municipios del Estado, para aprobar reformas constitucionales, el propósito es el ajustar el procedimiento de reformas a la Constitución de Tamaulipas, a fin de tener un poder legislativo autónomo en sus decisiones.
Isidro Vargas Fernández, coordinador de la fracción del Partido del Trabajo, sostuvo que, en esta reforma, se contempla actualizar la Ley Suprema Estatal, en aras de ponderar la flexibilidad para modificar la misma, suprimiendo su rigidez.
Esto, conforme a la realidad social de nuestro Estado, ya que la voluntad de este Congreso se ve perjudicada y supeditada en la opinión de los entes municipales, por ello, se considera viable que este Congreso local recupere su atribución de legislar, “sin que sus determinaciones respeto a las modificaciones que sufre el texto constitucional local sea objeto de escrutinio de los Ayuntamientos del Estado”, enfatizó.
En ese sentido, estimamos loable que la Legislatura ejerza de manera eficaz la función reformadora de nuestro máximo ordenamiento legal y así favorecer el impulso en beneficio de la población que habita y transita por el Estado de Tamaulipas, propiciando con ello la construcción de mejores escenarios que permitan la consolidación de una visión del futuro que ayude a resolver los requerimientos legislativos del pueblo tamaulipeco.
Todo esto, en aras de emprender modificaciones constitucionales que favorezcan la vida pública del Estado y los derechos humanos de los tamaulipecos sin que exista la “intromisión” de los municipios, concluyó.
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