El régimen de Nicaragua ordenó la expulsión del embajador de Brasil en Managua, Breno de Souza Brasil Dias da Costa, según informó la plataforma regional Divergentes, basándose en fuentes diplomáticas. La decisión se tomó luego de que el diplomático brasileño se negara a asistir a la celebración de los 45 años de la revolución sandinista el pasado 19 de julio en la Plaza La Fe, Managua.
La ausencia de de Souza en el evento, al que asistieron principalmente delegaciones de Cuba, Venezuela y Rusia, causó la furia del gobierno de Daniel Ortega, ya que faltaron otros jefes de Estado y representantes diplomáticos prominentes.
Hasta ahora, ni los gobiernos de Brasil ni de Nicaragua han hecho pública la expulsión. En una entrevista reciente, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, reveló que Daniel Ortega no ha respondido a sus llamadas telefónicas desde junio de 2023, cuando el papa Francisco le pidió que intercediera por el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, quien fue encarcelado y posteriormente desterrado al Vaticano junto a otros 18 religiosos en enero de 2024.
Lula da Silva ha tomado distancia de algunas posturas políticas de Ortega y, junto a México y Colombia, promueve una solución negociada para la crisis en Venezuela, en contraste con el apoyo del régimen nicaragüense a Nicolás Maduro.
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