Alma Cooper, una joven de 22 años y oficial del ejército estadounidense, fue coronada como la nueva Miss USA en un certamen lleno de polémicas y renuncias. Representando a Michigan, Cooper ganó el título en el Teatro Peacock de Los Ángeles, superando a las finalistas Miss Kentucky, Connor Perry, y Miss Oklahoma, Danika Christopherson.
El concurso se llevó a cabo con normalidad tras las recientes controversias en la organización. La anterior Miss USA, Noelia Voigt, renunció a su corona citando problemas de salud mental y un ambiente de trabajo tóxico. Savannah Gankiewicz asumió el título en mayo, pero también se retiró debido a amenazas de muerte y mensajes de odio.
Cooper ahora representará a Estados Unidos en la próxima edición de Miss Universo, programada para noviembre. La elección de Cooper busca restaurar la estabilidad y el prestigio del certamen tras los difíciles eventos de los últimos meses.
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