El expresidente y candidato presidencial republicano, Donald Trump, ha aceptado el desafío de la vicepresidenta Kamala Harris para debatir ante las cámaras. En su primer mitin en Pensilvania desde el atentado contra su vida el pasado 13 de julio, Trump declaró: “Bueno, Kamala. Adelante. Desafío aceptado. Comparemos nuestro historial punto por punto”.
El evento, celebrado en el Holland Arena de Harrisburg, contó con la asistencia de unas 14 mil personas. Trump aprovechó la ocasión para atacar a Harris, llamándola “falsa” y “extremista de izquierdas”, y acusándola de crear caos en la frontera con México.
Kamala Harris, en un evento en Atlanta, desafió a Trump diciendo: “Si Trump tiene algo que decirme, que me lo diga a la cara”, y propuso un debate en septiembre, que Trump aún no ha confirmado oficialmente. Trump ha criticado el acuerdo para que el segundo debate se celebre el 10 de septiembre en ABC News, proponiendo en su lugar que sea Fox News quien lo organice.
La contienda entre Trump y Harris se perfila como un enfrentamiento decisivo en las próximas elecciones de noviembre, con ambos candidatos técnicamente empatados en las encuestas en estados clave como Pensilvania.
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