Las lluvias torrenciales continúan azotando el sureste de Texas, desencadenando una serie de inundaciones que han llevado a operativos de rescate en masa. Según informes de la oficina de emergencias del condado de Harris, más de 233 personas y 164 mascotas han sido evacuadas hasta el momento, sin que se hayan reportado víctimas mortales o heridos.
Las autoridades locales, incluyendo los condados de Jasper, Newton y Tyler, han instado a la población a mantenerse alerta, ya que las alertas de inundación aún están vigentes. Se espera que las lluvias continúen durante el domingo, con precipitaciones que podrían alcanzar hasta 76 mililitros en Houston y hasta 200 mililitros en algunas áreas aisladas del sureste de Texas, según el Servicio Nacional de Meteorología.
Houston, en particular, permanece en alerta máxima con órdenes de evacuación emitidas, debido al riesgo de inundaciones repentinas. Además, se advierte sobre la posibilidad de vientos peligrosos, granizo de gran tamaño y tornados aislados durante el día.
Aunque se espera que las lluvias disminuyan eventualmente, las autoridades advierten que la crecida de los ríos podría persistir en los próximos días, alcanzando niveles históricos en algunas zonas. La agencia federal de manejo de emergencias (FEMA) ha pronosticado que los ríos en el este de Texas alcanzarán su punto máximo en las próximas 24 horas, con una recesión lenta que podría mantener niveles de inundación significativos hasta mediados de semana.
Jeremy Justice, del Distrito de Control de Inundaciones del Condado de Harris, ha expresado preocupación por la posibilidad de inundaciones cercanas a los niveles récord observados durante el huracán Harvey en 2017, advirtiendo sobre el potencial de daños significativos en algunas áreas.
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