El Ayuntamiento de Turín, en el norte de Italia, ha dado luz verde a una nueva regulación que prohíbe fumar o vapear en espacios al aire libre a menos de cinco metros de distancia de otras personas sin su consentimiento expreso. La medida, que entrará en vigor en dos semanas, busca fomentar una cultura de respeto mutuo y reducir el impacto del tabaquismo en la población.
Según medios locales, la prohibición se extiende a todos los productos de combustión, incluyendo cigarros, puros, pipas, tabaco calentado y cigarrillos electrónicos. El alcalde de Turín, Stefano Lo Russo, ha respaldado la medida, calificándola como “de sentido común” y enfatizando su importancia para respetar a quienes no fuman.
Aquellas personas que infrinjan la normativa, incluida en el reglamento de la policía municipal de Turín, se enfrentarán a multas de hasta 100 euros. La iniciativa, impulsada por el concejal Silvio Viale del partido político +Europa, recibió un amplio apoyo en la Junta municipal, con solo dos abstenciones provenientes del Partido Demócrata de Lo Russo.
Sin embargo, la medida ha generado preocupación entre los propietarios de restaurantes turineses, quienes cuestionan su viabilidad logística, especialmente en las terrazas donde será difícil aplicar la prohibición de manera efectiva.
Esta regulación sigue la tendencia de otras ciudades italianas como Milán y Módena, que ya han implementado medidas similares para proteger la salud pública y promover entornos libres de humo en áreas públicas y cercanas a niños y lugares sensibles.
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