Se emite un exhorto al Instituto Nacional Electoral, y a la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Federal, y sus homólogas en las entidades federativas para que implementen de manera inmediata un ajuste en el “Plan de Seguridad para candidatas y candidatos”, mecanismo que resulte proactivo y establezca contacto directo y ofrecimiento de medidas de seguridad y protección para las y los candidatos a cargos de elección popular en el proceso electoral en curso.
Imelda Margarita Sanmiguel Sánchez, legisladora de Acción Nacional, expone en su punto de acuerdo que al día de hoy 24 precandidatos y candidatos y candidatas de todos los partidos políticos y en estados gobernados por diversas opciones políticas como Michoacán, Chiapas, Guerrero, Estado de México, Veracruz, Puebla, Colima, Zacatecas, Jalisco, y Guanajuato, han sido asesinados en México en este proceso electoral.
Esta horrorosa realidad, a nosotros como servidores públicos en funciones nos obliga a reflexionar en diversos aspectos, acotó en tribuna legislativa.
El primero de ellos es que se brinda un innegable panorama sobre el involucramiento de la delincuencia organizada en el proceso electoral en curso en diversas zonas del país, y por otra parte se nos revela la inefectividad de las medidas efectuadas hasta hoy por el Instituto Nacional Electoral, y por las instancias encargadas de la seguridad, la Secretaría de la Defensa Nacional; la GUARDIA NACIONAL y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y sus homólogas en las diversas entidades federativas, aseveró.
Sanmiguel Sánchez, apuntó que en muchas ocasiones, quienes son candidatos, no solo se enfrentan a las complejidades propias de la contienda y la inseguridad en sus territorios, sino que además, previo a solicitar directamente la ayuda a las autoridades encargadas mencionadas;, y las propias reglas del mecanismo de ayuda; debe antes pedir el visto bueno de su partido político y en ocasiones también por el modelo político personalista y patriarcal. de ejercer el poder, por parte de su gobierno local.
Para muchos candidatos, nos guste o no en la política real, el hecho de tener que pedir ayuda, implica también reconocer en público que las cosas no van del todo bien en su municipio y estado, y eso en ocasiones esto rompería con la narrativa oficial de su propio partido en el poder, mismo que en ocasiones se niega a reconocer los errores de su gestión, y lo anterior entonces pudiera significar es llegar a perder el apoyo o la confianza de la autoridad al mando, las y los candidatos temen ser los primeros en pedir ayuda, o dicho de otra manera, nadie quiere ser quien le ponga el cascabel al gato.
Finalmente reitero, dada la cultura política real que se explicó antes y como consecuencia de este deficiente sistema, podemos concluir que las autoridades no están cumpliendo con el objetivo de atajar el problema real, sino que están “burocratizando” el disfrute de un derecho humano fundamental, el derecho a la vida y el derecho a la libertad política.
+ Imelda Margarita Sanmiguel Sánchez, legisladora de Acción Nacional.
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