Estados Unidos, 18 de enero 2024.- En una serie de bombardeos llevados a cabo por el Ejército de Estados Unidos, se confirmó la destrucción de 14 instalaciones de lanzamiento de misiles hutíes en territorio yemení controlado por los rebeldes. Estas instalaciones estaban “listas” para realizar nuevos disparos y presentaban una amenaza inminente para los buques mercantes y de la Armada estadounidense en la región, según informó el Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM).
En un comunicado publicado en redes sociales, el CENTCOM destacó que estas acciones buscan proteger las vidas de los marineros inocentes y afectar las capacidades ofensivas de los rebeldes hutíes en el mar Rojo. El comunicado también indicó que estas operaciones seguirán llevándose a cabo para garantizar la seguridad en la región.
Previamente a estos bombardeos, se había informado de un ataque contra un buque con bandera de Islas Marshall y propiedad estadounidense en el golfo de Adén, frente a las costas de Yemen.
En respuesta a los incrementos de los ataques hutíes en el mar Rojo, Estados Unidos y el Reino Unido iniciaron una serie de bombardeos contra posiciones hutíes en Hodeida, Taiz, Dhamar, Al Baida y Saada, según informó la Portavocía de temas de seguridad del Ministerio del Interior en su canal de Telegram.
Cabe destacar que la Administración de Joe Biden ha vuelto a designar a los rebeldes hutíes como grupo terrorista, revocando la decisión de retirarlos de esta lista en febrero de 2021. La decisión anterior se había tomado considerando el impacto devastador que esta designación podría tener en el acceso de los yemeníes a productos básicos como alimentos y combustible.
Los rebeldes hutíes, respaldados por Irán, controlan la capital de Yemen, Saná, y otras áreas del norte y el oeste del país desde 2015. Esta escalada de tensiones se produce en medio de la respuesta de los hutíes a la ofensiva israelí contra la Franja de Gaza, que ha incluido ataques a embarcaciones con alguna conexión con Israel.
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