Aunque no da datos sobre México, en América Latina aumentan las sustancias sicoactivas con riesgos graves para la salud pública, alerta el Programa Global de Vigilancia de Drogas Sintéticas de Programa Forense (SMART) de la ONU.
De acuerdo con la unidad de investigación de la Oficina de la ONU contra la Droga y Delito (ONUDD), las nuevas sustancias sintéticas suman 704 desde 2013.
En su reporte sobre desafíos emergentes con relación a drogas en América Latina señala que en 2023 se añadieron 13 drogas a la lista.
Argentina y Colombia identificaron el mayor número con cuatro cada uno; seguido por Chile con tres; Brasil con dos, y Bolivia y Salvador, con uno.
Se venden de forma engañosa como sustitutos de anfetamina y éxtasis, en polvo o píldoras. Los que las usan corren riesgo de sufrir efectos adversos. Algunas son de mayor potencia y pueden generar problemas de salud mental agudos y crónicos.
Otras 4 sustancias nuevas pertenecen a alucinógenos llamados “sicodélicas” .
Una investigación en Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú identificó que la prevalencia del consumo de LSD en algún momento de la vida de los universitarios fue de 0.5% en 2009, aumentando a 1.7% en 2012 y a 3.8% en 2016.
Otras 3 drogas del grupo anestésico como ketamina, no adormece ni anestesia, desconecta del entorno. Es consumida como analgésico y de uso recreativo. Seaspira, en ocasiones con otras drogas, polvos y éxtasis. Los consumidores sufren daño en la vejiga.
De estas sustancias una pertenece a opioide, el carfentanilo de efectos similares a morfina y fentanilo; euforia, relajación, sedación, bradicardia, hipotermia y depresión respiratoria. La sobredosis provoca paro respiratorio y muerte.
Al igual que América Latina, las nuevas sustancias sicotrópicas son un reto para la salud pública en la Unión Europea. En 2022, 41 drogas nuevas se notificaron por primera vez al Sistema de Alerta Rápida (SAR) de la UE, por lo que el número total de nuevas sustancias psicoactivas objeto de seguimiento europeo ascendió a 903.
Preocupa la presencia de nuevos cannabinoides ya que muchos consumidores se exponen involuntariamente a estos productos mucho más potentes.
Estas drogas representaron más de la mitad de las nuevas sustancias notificadas por primera vez
al Sistema de Alerta Temprana de la UE en 2022
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