A pesar de su quebranto de salud, la Secretaria del Trabajo, se mueve como “pez en el
agua” en el tema de productividad, ya que los resultados de sus tareas encomendadas, salta
a la vista su experiencia como una eficaz servidora pública.
Y es que la tampiqueña Olga Sosa Ruiz, trae mucha experiencia para “el teje y maneje” del
servicio público, que no solo queda en promesas, sino en resultados reales de querer servir
a la ciudadanía.
Por lo tanto desde su llegada en esta administración estatal, y en el rubro donde se
desempeña, ha marcado la diferencia para combatir el rezago, en los juicios laborales,
además su empatía le ha permitido defender los derechos de los trabajadores de
Tamaulipas.
Otro renglón importante es la celeridad para los empleos, ya que Tamaulipas se posiciona
en los primeros lugares, como un estado generador de empleo formal, por lo tanto la
transformación sigue dando buenos resultados a favor de los más necesitados.
Y por si fuera poco ocupa el cuarto lugar a nivel nacional, en el rubro de conciliación en al
ámbito de dar respuestas en tiempos cortos, o sea rompen records, en las tareas para
preservar la justicia y la armonía laboral con respecto a los derechos de los trabajadores.
Además se ve la mano de experiencia del Director General del Centro de Conciliación
Laboral del Estado, José Ives Soberón, ya que su vasta experiencia como servidor público
en el tema de mediación, ha llevado óptimos resultados en este rubro a la Secretaria de
Trabajo y Previsión Social.
Y también se puede destacar la experiencia en el ámbito laboral de Mario Mireles,
Subsecretario del Trabajo y Conciliación, en donde aplica todas las acciones para dar
buenas cuentas en ese renglón.
“ENFRENTANDO GOLIATS”.
La historia, dice que un día la nación de Israelitas fue llamada a pelear contra los Filisteos,
ambos ejércitos se encontraban frente a frente en lados opuestos del valle de Ela, ahí
destacaba un rival de grande estatura y de robusta complexión física destacaba y
sobrepasaba a todos en el campamento de lucha.
Era Goliat, quien se paseaba por todas las filas burlándose de los israelitas y de su Dios,
retando a ver si había un solo hombre que se atreviera a pelear uno a uno contra él, ahí el
rey Saúl y su pueblo asustados no hacían nada.
En ese tiempo David fue enviado por su padre a visitar el territorio de guerra para que le
pudiera reportar noticias del campamento y de los soldados ya que varios de sus hijos
estaban entre las filas, era a un pequeño, pero muy valiente en su convicción a Dios.
Y es así que pidió el enfrentarse al temido gigante, y se fue armado con tan solo una
honda y cinco piedras y se encontró en el campo de batalla donde lo esperaba un
impaciente, orgulloso y rebosante “rival” quien estaba armado con espada y lanzas, se
burló del joven muchacho, pues su apariencia era frágil y sin armadura.
Pero David respondió que él había venido con la fuerza de Dios de los ejércitos,
inmediatamente después agarró una de sus piedras y la colocó en su artefacto de lucha, la
tiró hacia la frente del gigante, la cual se incrustó de forma certera cayendo muerto,
enseguida el pequeño tomó la espada de Goliat y le cortó su cabeza.
Entonces, al ver que su defensor había caído, los filisteos huyeron del campo de batalla y
es así que Israel había ganado gracias un joven muchacho lleno de valor y fe para creer en
el poder de Dios.
Amable lector, a lo largo de nuestra vida, muchas veces tenemos que enfrentarnos a
situaciones difíciles e imposibles de superar humanamente hablando, ellas se levantan
contra nosotros intentando no sólo afectarnos en lo físico- emocional, sino también en lo
espiritual.
Y es que en el diario vivir, con frecuencia, se nos acercan gigantes y a veces se quieren
quedarse instalados en nosotros, entre estos pueden ser emociones, como: el miedo,
desánimo, rabia, tristeza, impaciencia, pesimismo, depresión, envidia, etc.
Tome en cuenta que hay muchos Goliats, que representan los obstáculos y riesgos que
encontramos en la vida, ya sean espirituales o físicos, y su presencia deteriora y merma
nuestra existencia.
Pero, la fe es un arma poderosa contra este enemigo, por eso estoy segura que el verdadero
portador de un ideal, no le parece extraña las dificultades, ni se acobarda ante estas, sino
más bien se eleva ante ellas. Sin embargo pienso también que ante las dificultades que
hay, tenemos que pagar un precio de lucha, junto a esto, nuestra perseverancia, contra todo
desafío, tenemos que creer precisamente en la esperanza.
Hasta la próxima.
gildateran@yahoo.com.mx
Discussion about this post