Ciudad de México, 22 de junio 2022 – Su pasado, repleto de historia, ha sentado las bases de un futuro prometedor que solamente puede ser descubierto por aquellos dispuestos a derribar fronteras y fluir.
Aquí, no importa de dónde vengas, esta urbe le pertenece a todo aquel que no le teme a caminar entre sus calles y a los convencidos de que en lo cotidiano hay magia y que, por eso, se atreven a mirarla con nuevos ojos, aunque ya la hayan visto antes. También es llamada casa por los miles de soñadores que lo han dejado todo por abrirse a las nuevas posibilidades que tiene la ciudad. Carolina Miranda y Bárbara López son mujeres apasionadas que se han convertido en dos locales más para recorrer caminos y dedicarse a lo que en verdad aman: la actuación. Una profesión que solo puede ser vivida a plenitud si se aborda con determinación.
Además de sus múltiples proyectos, ahora se unen junto a Johnnie Walker para inspirar a todos los mexicanos a seguir caminando en su última campaña Keep Walking. Carolina Miranda, originaria de Irapuato, Guanajuato, lleva una década dándole vida a mujeres fuertes y decididas, como la despiadada Vicenta Acero ‘La Coyote’, en Señora Acero, o de fuertes convicciones, como Elisa, en el éxito de streaming ¿Quién mató a Sara?. Impregnando en cada una de ellas un pedazo de su personalidad, Miranda se ha convertido en una promesa de la actuación que sabe que cuando se apagan las cámaras de los platós solamente queda explorar nuevos horizontes. ‘No puedo creer todo lo que he avanzado. Creo que la niña de 15 años que quiso [tomar] este camino, que algún día soñó con llegar a esta meta y recorrer lo que nos ha [sucedido] en la actuación, ha sido maravilloso; un camino arduo, complicado, con mucha disciplina, mucho esfuerzo, mucha confianza’, comenta Miranda.
A su vez, Bárbara López cambió el paisaje montañoso de Monterrey por la capital mexicana, en donde perfeccionó su capacidad histriónica. Esa decisión marcaría su camino: lograría un par de años después dejar huella en la televisión abierta como Juliana Valdés, quien junto a la actriz Macarena Achaga formó la primera pareja lésbica en un horario estelar. Además, probó su versatilidad como Dolores ‘Miss Guerrero’, en Señorita 89, una serie de tintes crudos que revela el pasado amargo de los certámenes de belleza en México. ‘Me siento muy orgullosa y feliz de saber que todo mi esfuerzo valió la pena, feliz de saber que los sueños se cumplen si uno no quita el dedo del renglón y por supuesto siempre muy agradecida con todas las personas que formaron parte del crecimiento en mi carrera, porque siempre camino en equipo’, destaca López.
¿Qué sigue para ellas? Tal vez cine, teatro o televisión, las posibilidades se vuelven infinitas
cuando te encuentras en el lugar correcto y, sobre todo, si tienes talento y pasión. Ambas nos inspiran a conseguir lo que anhelamos y a celebrar cada logro, sin dejar de ser fieles a nosotros mismos jamás. Ellas recorren todos los caminos decididas a dejar su huella en el mundo.
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