“¡Triste época la nuestra!… es más fácil desintegrar un átomo, que un prejuicio”
Albert Einstein
LO CLARO. En este nuevo mundo evolutivo y conectado, todo se relaciona
entre sí.
El antes complicado uso de las tecnologías para las personas de edades
mayores y los pequeños, igualmente evoluciona y forma parte de esa
conectividad.
Para lograr la eficiencia en las búsquedas de información que cada persona
demanda, la semántica en la aplicabilidad de los motores de búsqueda es
trascendente.
Es decir, que el uso del lenguaje logre que sea tan fácil para relacionar la
información existente en la llamada red de redes, con las necesidades
humanas de niños y adultos en cualquier tópico; salud, entretenimiento,
alimentación, avances tecnológicos.
Búsquedas y respuestas con mayor precisión.
Así lo comparten mujeres expertas en ciencias de la computación dentro del
marco del ‘Día Internacional de la Niña y de la Mujer en la Ciencia’ recién
llevada a cabo por la academia y que bajo los auspicios de la Universidad
Autónoma de Tamaulipas se dieron a conocer este tipo de aportes científicos.
Dentro del World Wide Web Consortium (organismo que garantiza la existencia
a largo plazo de la red de redes), la Web Semántica jugará un papel relevante
al adaptar la vida practica de las personas al lenguaje tecnológico de la red.
LO CLAROSCURO. Graves prejuicios nos acompañan a los mexicanos
respecto a la erradicación paulatina de la corrupción en el entramado
gubernamental de este país.
A pesar de ya contar con instrumentos bastantes que garantizan por si mismos
el desanimar a quienes ejercen función pública a ponerle mano a las finanzas
producto de los pagos de impuestos o al beneficio personal respecto del poder,
los mexicanos en este 2021 aún conservan reticencias sobre los resultados
obtenidos.
Merced a los lentos efectos que arrojan el abrir carpetas de investigación en
contra de funcionarios corruptos, la opinión pública rechaza el que se lleven a
cabo real combate al flagelo que contrae a las instituciones públicas.
Una tarea relativamente nueva la de perseguir a los malos funcionarios y a
quienes se coluden con estos; la agravante de crecimiento principal –la
corrupción- es una amenaza a vencer que habría permanecido desde que la
tarea de administrar el estado existe.
¿Los resultados? Difícilmente la administración y procuración de justicia es tan
pronta y expedita como el delito que se comete.
Sin embargo, el tortuoso camino de fincar responsabilidades, generar
expedientes que permitan sustentar la culpabilidad y proceder a emitir un
dictamen, tardan tanto como la misma ley lo permite, pero al final la luz de la
verdad prevalece.
La Función Pública federal señala al menos 26 mil expedientes abiertos contra
igual número de funcionarios que habrían incurrido en faltas administrativas.
Ya hay 20 mil de éstos con mayor avance en sus investigaciones para darles
respuestas a los mexicanos.
La responsabilidad de aportar pruebas y garantizar que los culpables
encuentren su castigo, ahora tiene sus mejores aliados en la propia ley que
impide que se queden sin condena quienes lo merecen.
Tarde… pero seguro.
Así llegamos a ejemplos que ya comienzan a dar los resultados que la
sociedad esperaba.
¿Se acuerda del consentido sexenal, director de CONADE –la del deporte
nacional- y encargado de la conciliación para la paz en Michoacán? ¿No?
Entonces… ¿Se acuerda del caso de la niña Paulette?
Alfredo Castillo Cervantes (Cliente de este espacio de opinión) habría
detentado importantes cargos gracias a su cercanía con el poderoso grupo
Atlacomulco.
Hoy se le finca una responsabilidad administrativa. “Faltó a la verdad” en sus
declaraciones patrimoniales de 3 años.
En esta ‘omisión’, dejó de informar a la autoridad la existencia de 18 millones
de pesos en sus cuentas bancarias y en principio de cuentas es sancionado
con la inhabilitación para ejercer cargo público alguno por diez años. Vendrán
más amonestaciones al inculpado.
Es un buen comienzo.
La ética en el servicio publico libra su más grande batalla. Ganar la credibilidad
y el respeto social.
COLOFÓN: El prejuicio de que siempre existirá corrupción, será un latente
reclamo a quienes nos gobiernan. Hasta que demuestren lo contrario. No
importa que sea tarde…
alejandrodeanda@hotmail.com
@deandaalejandro
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