Para entender el presente es necesario recurrir a la historia, a veces
quienes inician su vida productiva, temen estar en un ambiente que
nunca ha existido y que sus esfuerzos emprendedores serán
infructuosos ante un futuro incierto.
Acosados por la información hoy tan extensa y a la mano, piensan que
es el final de su vida en los pequeños negocios.
Nada más alejado de la realidad, que esta situación por la que se
atraviesa, solo engrandecida por el uso recurrente de las redes
sociales, que son un campo fértil para la siembra de odio,
desesperación, desesperanza y sobre todo miedo.
Los verdaderos emprendedores son los que no temen al futuro, los
verdaderos comerciantes son los que comparten, los verdaderos
empresarios son los que se preocupan por sus empleados, los
verdaderos políticos son los que actúan, los verdaderos líderes son los
que abren el camino.
Lo siguiente va entrecomillado.
“Los movimientos sociales se inducen, al menos eso es lo que
siempre desde el Gobierno Federal nos dicen, a veces directamente o
en otras ocasiones por medio de los analistas, intelectuales,
politólogos y expertos.
Por ello México desde el principio de su historia carga con el
estigma de ser un país represor, pues todo aquel que osaba
encabezar un movimiento de insurrección terminaba pagando con
presidio la osadía.
La independencia, la promulgación de las constituciones, la
reforma, los cristeros, los ferrocarrileros, los comunistas, los
estudiantes del 68 y tantos otros, son referencia suficiente para que
con orgullo la derecha tradicional y recalcitrante se arrogue el derecho
de considerarse el poder tras el trono.
En la búsqueda de lo mejor para ellos, han intervenido con
acierto para que la mano dura del gobierno en turno, haga su aparición
y desintegre, atomice y diluya cualquier brote de inconformidad social.
La pregunta obligada es si ahora que son gobierno, estarán
dispuestos a exigir pública o privadamente una intervención similar
para evitar que la sociedad exprese su inconformidad por la presencia
militar en las calles.
Será interesante observar la decisión que tome el gobierno en
caso de que a los experimentados analistas de la COPARMEX se
percaten de que un nuevo movimiento social se está incubando en
muchas ciudades y que sin temor a nada, toman las calles y las plazas
con pancartas y oradores para expresar una inconformidad que atañe
a la seguridad nacional.
Habrá que ver las reacciones de inteligencia para poder discernir
de donde provienen los apoyos logísticos y desde luego económicos,
que permiten la expresión de las ideas coincidentemente a la misma
hora y en diferentes municipios, pero con el mismo guion de
inconformidad.
Si la fuerza militar especializada no logra dar con los insurrectos,
bien habría que valorar las verdaderas intenciones de los operativos.
Por otro lado la manipulación mediática también merece
investigación, pues los analistas políticos no tenemos referencia
alguna que nos haga pensar en la posibilidad de que, desde hace
mucho tiempo, los colonos se hayan venido organizando a nivel
estatal para coordinarse tan eficientemente.
Salvo que sea una estrategia nueva gubernamental del
presidente del subempleo, pues en ese caso entenderíamos que los
protestantes lo hacen simple y sencillamente porque necesitan llevar
tortillas a la casa.
Jamás en la historia de la humanidad, los movimientos sociales
han explotado por combustión espontánea, esto lo saben bien las
autoridades, ahora solo nos queda esperar, para saber si la represión
que tradicionalmente ha exigido la derecha se llevará a cabo para
acabar con las protestas.”
Todo lo entrecomillado lo escribí el 7 de febrero del 2008, sí, a menos
de dos años apenas del inicio del gobierno de Felipe Calderón, así
que estimados jóvenes emprendedores, el mensaje es para ustedes,
utilicen su criterio y no suden calenturas ajenas, hoy lloran solo los
hijos de los que lloraron entonces la perdida de sus privilegios, esos a
los que ustedes y sus padres nunca tuvieron acceso, lo que hoy
sucede, agrandado por la facilidad de traer una computadora en la
mano, no es más que una VIEJA HISTORIA.
Jorge Alberto Pérez González
www.optimusinformativo.com
optimusinformativo@gmail.com
Discussion about this post