A lo largo del tiempo los legisladores han
ganado fama de que no atienden los reclamos
ciudadanos, solo aprueban lo que les ordena el
Presidente, y pocos –muy pocos—son los que
presentan alguna iniciativa que beneficie al
pueblo.
Y eso recientemente se pudo comprobar
cuando el diputado federal Porfirio Muñoz Ledo
llamo “hipócritas y lambiscones” a sus propios
compañeros de bancada de MORENA en San
Lázaro, porque no le aprobaron una reserva y
luego le dijeron que si lo habían apoyado, pues
sus compañeros aprobaron tal cual la iniciativa
enviada por el Presidente Andrés Manuel López
Obrador, olvidando que el Presidente ha dicho
que respeta al Congreso y eso no lo entienden
los diputados lambiscones que “quieren ser más
papistas que el Papa”.
Antes de abandonar el salón de plenos y de
que el proyecto se enviara al Senado para su
revisión, Porfirio les dijo a los morenistas “no
les dejare pasar una mas hipócritas”.
Pero “apareció el peine” porque la redacción
del artículo cuarto de la Constitución en la que
se reconocen como derechos los programas
sociales del actual gobierno no quedaba muy
claro como se lograrían, y Muñoz Ledo planteó
que se hagan todas las gestiones necesarias
para obtener los recursos que puedan
garantizar un estado de bienestar, y la mayoría
de MORENA rechazo que la reserva se
discutiera y fue desechada.
La reserva de Porfirio decía que las
autoridades deberán adoptar medidas
legislativas, administrativas, económicas y en
general todas aquellas que sean necesarias
para generar el máximo de recursos, a fin de
lograr progresivamente el Estado de bienestar.
Pero no les importo a sus compañeros de
bancada, y el ilustre legislador mexicano
Porfirio Muñoz Ledo abandono el salón entre
aplausos y gritos de los diputados de oposición
que coreaban “Porfirio, Porfirio, Porfirio”.
bladijoch@hotmail.com
Discussion about this post