“Desde el cielo una hermosa mañana, desde el cielo una hermosa mañana, LA GUADALUPANA, LA GUADALUPAN, LA GUADALUPANA, bajo al Tepeyac”, dice estrofa de la canción de EMMANUEL a la Virgen de GUADALUPE que hoy se escucha en México entero.
México es un país fuerte, valeroso, una nación que ha soportado de todo y sigue de pie, pero además es un mosaico enorme de tradiciones, costumbres, ideologías, credos, colores y sabores.
Nuestro México es una nación donde caben todos los cultos, pero definitivamente el catolicismo sigue predominando, la fe en la Virgen de GUADALUPE es resistente, para muchos mexicanos inquebrantable.
Cierto es que hablar de política o religión es entrar en un laberinto muy complicado, más cuando hay diferentes creencias o ideologías, pues es difícil que todos estemos de acuerdo, siempre habrá opiniones encontradas, además de cuestionamientos para quienes digan o escriban sobre un tema que no es afín a la generalidad de las personas.
Y si, que bueno que así sea, es parte de la individualidad de las personas la manera de pensar, creer, sentir, cada quien es libre de tener la ideología o creencia que prefiera, es su derecho y se deben respetar, como dijera DON BENITO JUAREZ GARCIA, “El respeto al derecho ajeno es la paz”.
Sin embargo, en este México lindo y querido todos los días se habla de política y cosas peores, es decir, de los personajes que viven de ella, y no, nunca hay acuerdo total, cada quien ve las cosas de acuerdo a sus conveniencias, de acuerdo al color del cristal con el que visualizan en panorama.
Lo mismo sucede con la religión, cada quien tiene sus creencias, pero nadie puede negar que la VIRGEN DE GUADALUPE es un icono religioso mexicano que ha formado parte de la historia de nuestro país y trascendido más allá de las fronteras, en buena parte del mundo se sabe y escucha hablar de la Morenita del Tepeyac.
Nadie puede negar que la Virgen de GUADALUPE es parte de las raíces de los mexicanos, de nuestra identidad, un símbolo espiritual muy importante para todos los que creen en ella.
Se estima que en México casi el 80% de la gente es creyente de la religión católica y para esa población la virgen de GUADALUPE es más que su reina, es luz, fe, esperanza, remanso de paz.
Somos un país que se estremece al escuchar las mañanitas a la Virgen de GUADALUPE, un pueblo que no tiene más que ofrecerle a su reina que su fe, agradecimiento y el corazón en cada oración. Y si, la GUADALUPANA esta tatuada en el alma de México.
En las horas aciagas que vive nuestro país, no hay un solo momento en el que no esté un mexicano pidiéndole a la Virgen de GUADALUPE que proteja a sus hijos con su manto, queque tranquilice a los demonios políticos y entes del mal, que interceda ante DIOS para que se tenga paz, que sanen los enfermos, que en este México lindo y querido se respire tranquilidad.
La situación es que hoy es una fecha sumamente importante para los creyentes de la fe católica, es 12 de diciembre, celebramos el día de nuestra REINA, a la Virgen de GUADALUPE, que también es parte de la historia de esta nación, y si, a la morenita del Tepeyac se le canta y reza con el corazón.
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