Ante el pleno del Congreso del Estado, se presentó iniciativa de decreto que tiene como propósito fundamental salvaguardar la salud pública de los habitantes del Estado de Tamaulipas, mediante el fortalecimiento del marco legal que regula la producción, distribución y venta de agua para consumo humano.
Francisca Castro Armenta, legisladora local de Morena, sostiene que, para ello, se presenta acción legislativa con proyecto de decreto para reformar la Ley de Salud del Estado de Tamaulipas, en materia de verificación de Establecimientos, Purificadoras y Embotelladoras de Agua.
El acceso a agua segura y de calidad es un derecho humano esencial, y garantizar es una responsabilidad primordial del Estado.
En este contexto, la proliferación de establecimientos purificadores, embotelladores y, especialmente, máquinas expendedoras de agua, demanda una atención prioritaria, ya que su operación, si no está debidamente regulada y supervisada, puede representar un riesgo significativo para la salud de la población, enfatizó.
Esta iniciativa busca establecer mecanismos efectivos para asegurar que el agua que consumen los tamaulipecos cumpla con los más altos estándares de calidad e inocuidad, protegiendo así su bienestar y calidad de vida.
A su vez fortalecer las facultades de la autoridad sanitaria para aplicar medidas de seguridad y sanciones en caso de incumplimiento, promover la coordinación entre las autoridades sanitarias, los municipios y otras instituciones para garantizar la efectividad de la regulación e informar y concientizar a la población sobre los riesgos asociados al consumo de agua de dudosa procedencia y sobre la importancia de reportar cualquier irregularidad
La ingesta de agua contaminada representa un riesgo significativo para la salud pública. Los microorganismos patógenos, como bacterias, virus y parásitos, pueden causar una amplia gama de enfermedades gastrointestinales, desde diarrea y vómito hasta infecciones más graves como la hepatitis A o el cólera.
Además, la presencia de sustancias químicas, como metales pesados o residuos de productos industriales, puede tener efectos tóxicos a largo plazo.
En este contexto, los establecimientos que purifican y/o embotellan agua, así como las máquinas expendedoras, desempeñan un papel crucial en la cadena de suministro de agua para consumo humano.
Sin embargo, “la falta de una regulación y supervisión adecuadas sobre estos establecimientos puede generar importantes riesgos sanitarios”, apuntó Castro Armenta.
En suma, esta iniciativa de reforma a la Ley de Salud de Tamaulipas emerge como una respuesta proactiva ante la creciente necesidad de asegurar la calidad e inocuidad del agua que consumen sus habitantes, especialmente a través de purificadoras, embotelladoras y máquinas expendedoras.
Reconociendo la insuficiencia del marco legal vigente para abordar las particularidades de estos establecimientos, la propuesta introduce mecanismos de vigilancia y control más robustos y específicos.
La acción legislativa fue enviada a las comisiones de Recursos Hidráulicos y Salud.
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