Claudia Sheinbaum no tendrá fácil el año que inicia y tal vez ninguno de los próximos para los que fue electa. Por lo pronto pareciera inminente la renuncia del secretario de Hacienda Rogelio Ramírez de la O, de quien aseguran se irá en febrero no solo por diferencias con algunos funcionarios sino por la fatiga emocional producto de las presiones naturales del cargo. Por otra parte, se prevé el retiro de Adán Augusto López y Ricardo Monreal, líderes como se sabe, de la mayoría en el senado y la cámara de diputados, respectivamente. Ambos serán embajadores. No olvidéis el pleitazo que sostuvieron antes de las vacaciones decembrinas que hizo ver requeté-mal a la presunta unidad morenista.
El asunto es que doña Claudia se las verá negras para sacar adelante al país. Agreguemos el escenario internacional que no favorece. Tendrá que batallar con la locura de Donald Trump decidido a poner en práctica el racismo y los restos del esclavismo a que es tan afecta la mayoría gringa, además de sus deseos manifiestos de invadir nuestro territorio pretextando terrorismo de grupos al margen de la ley. Mientras, habrá que esperar lo que sucederá en Canadá con la elección del nuevo premier que no sabemos de sus sentimientos hacia México, considerando por supuesto, el tratado comercial vigente.
Usted dirá que los riesgos para mantener la soberanía en un mundo dominado por el capitalismo son muchos, y tiene razón, sin embargo, existe confianza en que al final de cuentas se impongan la fortaleza, valores, tradiciones e historia republicana. Es justo a esto que se atiene el supremo gobierno según el reiterativo mensaje en “las mañaneras del pueblo”.
El optimismo tiene mucho que ver en el respaldo hacia la Señora Presidenta (con A). Vea nada más la encuesta aparecida en El Financiero la mera fecha dedicada a los Reyes Magos, la cual señala 78 por ciento de aprobación a los cien días de su mandato. Nada que ver con los augurios de algunos medios “de desinformación” que a través de “analistas” bajo pedido suponían lo peor. Sorpresas que da la vida, los nuevos programas de bienestar y obras anunciadas, han dejado sin argumentos a la quejumbrosa y maloliente oposición refugiada en la voz convertida en insultos de una minoría legislativa que solo busca justificación para seguir atragantándose con el dinero de los contribuyentes.
Y deje, peor bofetada para los nietos(as) de Porfirio Díaz, el proyecto de fabricación doméstica de vehículos con precios al alcance de la raza. Que aquí entre nos, tiene sus asegunes, aunque la intención es buena. Ya lo veremos en la práctica. Y viene la elección en el poder judicial que significará el principio el fin de la corrupción e inmoralidad de quienes lo integran. Y pa´l baile vamos.
SUCEDE QUE
Emotivo el convivio este martes entre comunicadores y el gobernador del estado. Ahí Américo Villarreal Anaya ratificó el respeto a la libertad de expresión en todas sus manifestaciones como corresponde a un régimen democrático y humanista como el que dirige. Importante, además, el anuncio de que el gremio periodístico cuenta ya con la protección institucional garante de mejor calidad de vida. En este sentido AVA hizo hincapié en las incansables gestiones realizadas por el compañero Francisco Cuéllar Cardona para alcanzar el señalado logro. No sobra decir que esto fue el sueño de varias generaciones. Ahora es realidad gracias a la transformación que incluye fundamentalmente el bienestar social.
Y hasta la próxima.
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