El príncipe Harry, hijo menor del rey Carlos III, está considerando un regreso parcial a Reino Unido como parte de una estrategia para reparar su imagen pública, según han informado medios británicos. Tras su alejamiento de las labores de la monarquía en 2020, el duque de Sussex, de 39 años, busca “rehabilitar” su reputación y mejorar su relación con su padre, quien recientemente reveló que está recibiendo tratamiento para un cáncer, aunque sin aportar detalles.
Harry ha consultado a amigos cercanos y antiguos ayudantes de confianza sobre esta posible estrategia, y entre las opciones que se barajan está la de asumir alguna obligación real discreta en el Reino Unido. Según las fuentes, un amigo cercano cree que si el príncipe regresa y participa en eventos de bajo perfil, podría recuperar el apoyo del pueblo británico, el cual se vio afectado tras las revelaciones que hizo en su libro ‘Spare’ (En la sombra) sobre su tensa relación con su familia.
Desde su mudanza a Estados Unidos con su esposa Meghan Markle y sus hijos Archie y Lilibet, el príncipe Harry ha mantenido una relación distante con la familia real. A finales de agosto, se informó que Harry y su hermano William asistieron al funeral de Robert Fellowes, cuñado de su madre Diana de Gales, en el condado de Norfolk, pero no intercambiaron palabras durante el servicio.
Este posible regreso parcial a Reino Unido podría marcar un nuevo capítulo en la vida del duque de Sussex, mientras busca equilibrar su vida en Estados Unidos con sus lazos familiares en su país natal.
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