El Departamento de Estado de Estados Unidos, a través de su portavoz Matthew Miller, ha celebrado el reciente acuerdo de alto el fuego entre la República Democrática del Congo (RDC) y Ruanda, que comenzará el domingo en el conflictivo este del territorio congoleño. Este alto el fuego busca detener los combates entre el gobierno de Kinshasa y el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), respaldado por Ruanda.
“Estados Unidos acoge con satisfacción el alto el fuego abierto en el este de RDC anunciado por Angola el 30 de julio”, declaró Miller en un comunicado. Aplaudió los esfuerzos de mediación del gobierno de Angola y en particular del presidente angoleño Joao Lourenço, quien ha desempeñado un papel crucial en promover la paz y la reconciliación en la región como defensor de la Unión Africana.
Además, Miller elogió a los gobiernos de la RDC y Ruanda por su compromiso de continuar las negociaciones para poner fin al conflicto. Washington se ha mostrado dispuesto a apoyar la implementación y supervisión del alto el fuego, subrayando la importancia de que todas las partes involucradas respeten el Derecho Internacional Humanitario y los Derechos Humanos.
El alto el fuego entrará en vigor a la medianoche del 4 de agosto y será supervisado por un Mecanismo de Verificación creado específicamente para este propósito.
El M23, compuesto en su mayoría por tutsis congoleños, ha sido una fuente de inestabilidad en la región. Después de un conflicto entre 2012 y 2013, firmaron un acuerdo de paz con el gobierno congoleño en diciembre de ese año, con apoyo de tropas de Naciones Unidas. Sin embargo, el grupo lanzó una nueva ofensiva en octubre de 2022, provocando una crisis diplomática entre RDC y Ruanda. Kigali ha acusado a Kinshasa de apoyar a las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), un grupo armado rebelde fundado por hutus responsables del genocidio de 1994 en Ruanda.
Este acuerdo de alto el fuego representa un paso significativo hacia la estabilidad en la región, con la esperanza de que las negociaciones continuas puedan finalmente traer una paz duradera al este de la República Democrática del Congo.
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