Por más que el gobierno federal quiera hacernos creer que la violencia generada el pasado sábado durante la marcha ciudadana organizada por la llamada Generación Z fue por integrantes de la organización Marea Rosa, lo cierto es que nuevamente utilizó el denominado Bloque Negro para intimidar o disuadir a los participantes de la marcha del pasado 15 de noviembre.
No es la primera vez en que el gobierno federal recurre a los integrantes del Bloque Negro, puesto que también en la conmemoración de movimiento estudiantil del pasado 2 de Octubre, causaron disturbios, incendiaron negocios, asaltaron, entre otros desmanes para tratar de desprestigiar la protesta ciudadana por la violencia que hay en todo el país.
A propósito, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina se comprometió a que no había impunidad, que se castigaría a todos aquellos que generaron los actos violentos del 2 de octubre, sobre todo que se procedería contra los integrantes del Bloque Negro, pero hasta la fecha no hay nada en contra de los encapuchados que atacaron las instalaciones del Centro Cultural Universitario Tlatelolco, rompiendo cristales del acceso principal y arrojando objetos explosivos.
De regreso con la marcha del pasado 15 de noviembre, el Secretario de Gobierno de la Ciudad de México, César Cravioto Romero, como siempre culpó a la derecha de los disturbios del pasado sábado, sin embargo, resulta sospechoso que no se haya detenido a ningún integrante del Bloque Negro a pesar de que fueron quienes agredieron con petardos a los manifestantes y a los policías que resguardaban el Palacio Nacional.
Varios de los participantes en la marcha ciudadana organizada por la denominada Generación Z, les llamó la atención que las autoridades de la Ciudad de México hayan formado vallas simulando una “L” con el propósito de inhibir la concentración masiva en el zócalo.
También les resultó sospechoso que las autoridades de la Ciudad de México hayan cerrado con vallas el Eje Central Lázaro Cárdenas y la avenida Francisco I. Madero que son los principales accesos para el zócalo de la Ciudad de México viniendo del Palacio de Bellas Artes.
Y más porque el único acceso abierto para llegar al zócalo fue la avenida 5 de Mayo, cuya configuración causó confusión y que la llegada del contingente fuera lenta y tediosa, pero sobre todo causó alarma porque los integrantes del Bloque Negro atacaron a los policías que resguardaban a la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México.
En fin, por más que el gobierno federal trate de culpar a la organización Marea Roja y que la derecha haya financiado supuestamente la marcha organizada por la llamada Generación Z, lo cierto es que el descontento popular es evidente, como se puede constatar en las consignas expresadas por la muerte del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez (QEPD) y la violencia generada por el crimen organizado en el país.
Por cierto, el presidente Donald Trump de nuevo declaró ayer que no está “contento” con México porque el combate al narcotráfico no ha dado resultados, por lo que no descarta la posibilidad de un ataque contra los cárteles en territorio mexicano, cuya advertencia de inmediato prendió los “focos rojos” entre la clase política y en el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo.
La clase política ve con preocupación que hayan quedado atrás los elogios del presidente de Estados Unidos, puesto que es un claro signo de que se le agotó la paciencia a pesar de las cifras proporcionadas por el titular de la Secretaría de Seguridad y Atención Ciudadana (SAC), Omar García Harfuch acerca del combate a los cárteles de la droga en nuestro país.
Si bien es cierto que Donald Trump no actuaría sin el beneplácito de la presidenta Sheinbaum Pardo, la advertencia debe de ser tomada en cuenta porque es evidente el malestar que tiene, sobre todo porque en los últimos días ha enfrentado duros cuestionamientos en la unión americana.
Por último, de nueva cuenta el senador Gerardo Fernández Noroña fue corrido estudiantes universitarios, puesto que en esta ocasión el senador morenista fue abucheado y cuestionado durante el Tercer Encuentro Nacional Estudiantil de Ciencia Política, que se celebrado el pasado jueves en la Universidad de Guanajuato, le gritaron que el gobierno de la 4° Transformación dejó morir a Carlos Manzo Rodríguez, alcalde de Uruapan, asesinato durante la celebración del Día de Muertos en Uruapan, Michoacán.
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