Lando Norris se llevó una victoria clave este domingo en el circuito de Hungaroring, aunque el esfuerzo le pasó factura.
“Estoy muerto, pero el resultado es perfecto”,
dijo el piloto británico de McLaren al bajarse del monoplaza, tras una carrera exigente que le permitió recortar la ventaja en el campeonato a solo nueve puntos respecto a su compañero Oscar Piastri.
La estrategia del equipo fue arriesgada desde el inicio.
“Planeábamos hacer una sola parada al principio, pero ha sido duro, con Oscar presionándome en esa última tanda. No pensaba que nos iba a dar la victoria esta estrategia”,
reconoció Norris.
La carrera no empezó bien para él. Perdió dos posiciones ante George Russell (Mercedes) y Fernando Alonso (Aston Martin), lo que complicó sus opciones.
“Pensaba que capaz (lograríamos) un segundo puesto, pero en esa primera tanda no conseguía pasar a George, aunque ya con aire limpio podía hacer funcionar la estrategia”,
explicó el británico.
Sobre la pelea interna por el título con Piastri, Norris fue claro:
“Es divertido pelear con Oscar y es genial para el equipo. No sé si se puede decir que la inercia está de algún lado. He conseguido mantener a raya a Piastri y espero tener más batallas como esta en el futuro”.
Con este triunfo, el campeonato se aprieta y McLaren se mantiene como el equipo a vencer en esta temporada de Fórmula 1.
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