Los fiscales han reformulado la acusación contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en relación con su presunto intento de alterar los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, en las que fue derrotado por Joe Biden. La nueva acusación, presentada este martes, mantiene los cuatro cargos iniciales contra Trump, pero ajusta las imputaciones a la luz de un reciente fallo de la Corte Suprema.
Este fallo otorga al expresidente una amplia inmunidad frente a ciertos procesos penales, lo que ha llevado a los fiscales a descartar los cargos que alegaban que Trump intentó presionar al Departamento de Justicia para revertir su derrota electoral. Este ajuste parece ser un esfuerzo por mantener la viabilidad del caso, después de que la Corte Suprema dictaminara que Trump no podía ser procesado por esa conducta específica.
Donald Trump, quien sigue siendo una figura central en el Partido Republicano y un potencial candidato para las elecciones presidenciales de 2024, enfrenta múltiples casos legales. Además de este juicio, Trump está acusado en Georgia por intentar manipular los resultados electorales de ese estado y en Washington D.C. por conspiración para defraudar a Estados Unidos, entre otros cargos relacionados con su manejo de documentos clasificados y pagos secretos durante su campaña de 2016.
Estos casos representan un desafío significativo para el expresidente, quien sigue siendo un actor influyente en la política estadounidense.
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