Se exhorta al IETAM para que conforme a lo ordenado por el artículo 211 de la Ley Electoral del Estado y en ejercicio de las facultades que le confiere el artículo 110 fracción LXV del referido ordenamiento, requiera a los candidatos y partidos políticos que participaron en el proceso electoral reciente, retiren de inmediato su propaganda política.
Humberto Prieto Herrera, diputado local, sostiene que desde el pasado 17 de junio de este año en curso se venció el plazo conferido para ello así, vigile con la colaboración de las autoridades que corresponda, la aplicación estricta del programa de reciclaje de esa propaganda a efecto de que no termine convertida en un agente contaminante.
Las reformas político-electorales de 2007-2008 y de 2014, al regular que la propaganda electoral de los partidos políticos y de los candidatos debe ser reciclable y biodegradable, inscribieron en la norma electoral mexicana un discurso ambiental. Puntualmente, construyeron una línea discursiva que define la propaganda electoral como productora de un problema de contaminación por residuos sólidos o basura electoral, que a su vez se relaciona con un discurso ambiental más amplio: el de la modernización ecológica.
Estas reformas a la normativa electoral buscaron resolver el problema de los residuos o basura electoral generada por la propaganda, y, al hacerlo, incluyeron un discurso que produce y reproduce acciones y significados acerca de la relación sociedad-naturaleza, es decir, un discurso del dominio de lo ambiental comentó.
Dichos residuos provienen de pendones, pancartas, lonas, volantes y otros materiales que se colocan en la vía pública o se distribuyen en los domicilios particulares con el objetivo de promocionar personas, ideas o propuestas políticas durante los procesos electorales.
Es cierto que la ley electoral prevé sancionar a los sujetos obligados que no cumplan su obligación de retirar la propaganda electoral impresa de la vía pública; sin embargo, la imposición de sanciones no resuelve el problema ecológico que puede significar la propaganda plástica que no sea reciclada.
Para los tamaulipecos, resulta irrenunciable que el plan de reciclaje que los partidos y coaliciones plantearon al Consejo General del Instituto Electoral de Tamaulipas se cumpla y garantice que estos pendones no lleguen a los ecosistemas para garantizar que contaminan nuestro entorno y agraven la crisis ambiental que vivimos en la actualidad, puntualizó.
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