La secretaria general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), Celeste Saulo, reveló una preocupante realidad: el 50% de la población mundial carece de acceso a sistemas de alerta temprana sobre fenómenos climáticos. Esta falta de acceso, que afecta a millones de personas en todo el mundo, es un problema urgente que la OMM se ha propuesto abordar para el año 2027.
Según Saulo, el compromiso de la ONU es alcanzar este objetivo para 2027, aunque reconoce que es una meta ambiciosa. Para lograrlo, enfatiza en la necesidad de fortalecer tanto los sistemas de medición del estado de la atmósfera, océanos, hielo y ríos, como en mejorar los sistemas de pronóstico. Sin mediciones precisas, advierte, es imposible predecir con exactitud los fenómenos climáticos y emitir alertas tempranas eficaces.
La falta de alertas tempranas tiene consecuencias devastadoras, especialmente en un mundo afectado por el cambio climático. Eventos extremos como sequías, inundaciones, olas de calor e incendios forestales están en aumento, y muchas veces la sociedad no reacciona a tiempo para protegerse, incluso cuando los pronósticos son precisos y anticipados.
En América Latina y el Caribe, entre 1998 y 2020, los eventos climáticos causaron más de 312,000 muertes y afectaron a más de 277 millones de personas, según datos de la OMM. Saulo enfatiza la importancia de garantizar que nadie se quede atrás en la recepción de alertas tempranas, y reconoce que tanto los países en desarrollo como los desarrollados enfrentan desafíos significativos en este sentido.
A pesar de que Latinoamérica solo contribuye con el 9% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, es una de las regiones más vulnerables a los efectos del cambio climático. Los patrones de precipitación están cambiando, con eventos extremos cada vez más frecuentes. Saulo denuncia que, a pesar de los compromisos de los países para combatir el cambio climático, la situación climática sigue empeorando.
El informe de la OMM publicado hace un año advierte que existe un 66% de probabilidades de que la temperatura media anual supere en más de 1.5°C los niveles preindustriales para 2027, un umbral crítico acordado en el Acuerdo de París. Esta realidad pone de manifiesto la urgencia de fortalecer los sistemas de alerta temprana y tomar medidas concretas para abordar la crisis climática.
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