En una muestra de firmeza en su relación bilateral, China y Rusia cerraron filas en una reunión en Pekín, destacando la robustez de sus lazos y rechazando las sanciones unilaterales impuestas por potencias occidentales. El presidente chino, Xi Jinping, recibió al ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, quien visitó China en una misión oficial durante dos días.
Xi Jinping enfatizó el compromiso de Pekín en apoyar a Rusia en su lucha contra el terrorismo, subrayando la importancia de implementar los acuerdos alcanzados entre ambos países. Por su parte, Lavrov elogió los logros de China y expresó la determinación de Rusia en fortalecer aún más los lazos bilaterales, destacando la continuidad de esta relación con la reelección del presidente Putin.
Además de reafirmar su alianza, ambos líderes criticaron los comportamientos hegemónicos e intimidatorios de Occidente, especialmente de Estados Unidos. Lavrov hizo hincapié en la necesidad de mantener la alerta ante intentos de castigo unilateral, en referencia a los comentarios recientes de la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, sobre el exceso de capacidad industrial de China.
Las discusiones también abordaron temas globales, como la situación en Ucrania y Gaza. Lavrov elogió la postura imparcial de China sobre el conflicto ucraniano y su compromiso con una solución política. En cuanto a Gaza, ambos países respaldaron un alto el fuego y el establecimiento del Estado palestino, destacando la importancia de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU al respecto.
En relación con Asia-Pacífico, China y Rusia manifestaron su deseo de mantener la paz y la estabilidad en la región, mientras criticaban los esfuerzos de Estados Unidos por formar alianzas políticas dirigidas contra ellos. Lavrov reafirmó que la cuestión de Taiwán es un asunto interno de China, rechazando cualquier intervención externa en este tema.
La reunión entre China y Rusia no solo refleja la solidez de su relación bilateral, sino que también envía un mensaje claro de resistencia conjunta contra las acciones unilaterales y la hegemonía occidental en los asuntos globales.
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